La Asociación de Víctimas del Terrorismo desea mostrar su más enérgica condena ante los atentados perpetrados en el día de hoy en Navarra, Santander y Madrid respectivamente. Por un lado, durante la madrugada los asesinos han explosionado un artefacto en la oficina de Correos de la localidad navarra de Alsasua, para posteriormente continuar con la barbarie terrorista detonando cinco bombas en distintas carreteras próximas a Madrid. Igualmente el aeropuerto de Santander ha tenido que ser desalojado como consecuencia de la colocación de diversas granadas por parte de ETA. Una vez más los asesinos se han expresado de la única manera que saben hacerlo, sembrando el odio y el terror, dejando bien a las claras su firme voluntad de chantajear al gobierno español y, a su través, al conjunto de la ciudadanía de nuestro país.
Los referidos actos de terror ponen de manifiesto la verdadera cara de los asesinos de ETA, por mucho que numerosos agentes políticos se empeñen en hacer creer lo contrario. ETA sólo conoce el lenguaje del asesinato, el miedo, el chantaje y la extorsión y toda pretensión de negociación con los terroristas no supone más que doblegar al Estado de Derecho a los designios de un grupo de criminales. Por ello, la AVT reitera una vez más, con especial intensidad si cabe dado el día que conmemoramos, la necesidad de una defensa a ultranza de los valores constitucionales, verdaderos garantes de nuestro actual sistema político democrático, frente a aquellos que pretenden que la vía correcta pasa por la negociación y la cesión a quienes únicamente entienden de asesinatos, coacción y terror.
Los referidos actos de terror ponen de manifiesto la verdadera cara de los asesinos de ETA, por mucho que numerosos agentes políticos se empeñen en hacer creer lo contrario. ETA sólo conoce el lenguaje del asesinato, el miedo, el chantaje y la extorsión y toda pretensión de negociación con los terroristas no supone más que doblegar al Estado de Derecho a los designios de un grupo de criminales. Por ello, la AVT reitera una vez más, con especial intensidad si cabe dado el día que conmemoramos, la necesidad de una defensa a ultranza de los valores constitucionales, verdaderos garantes de nuestro actual sistema político democrático, frente a aquellos que pretenden que la vía correcta pasa por la negociación y la cesión a quienes únicamente entienden de asesinatos, coacción y terror.
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