La deuda soberana se acerca a la línea roja de la quiebra e intervención. Zapatero, empujado por la angustia en la que vive España ha modificado su agenda en el último minuto. Con la que estaba cayendo, después de hacer manitas con Gadafi, se iba a ver cómo está la rodilla del cocalero Morales y a dar un cariñito a la viuda argentina. Eso sí, sigue ejerciendo de ministro de deportes. Su marcha atrás no tapa su ínfima catadura cívica. La pregunta es: ¿qué o quién le ha hecho cambiar sus planes?
La preocupación está presente en todas las conversaciones entre ciudadanos. Hace unos meses la convocatoria adelantada de elecciones generales respondía a la ansiedad de tocar poder de los líderes del PP, pero Zapatero, en su inutilidad, ha conseguido que esa demanda sea un clamor de la sociedad. Menos de los 37 elegidos para opinar ante el presidente. Unos líderes que a pesar de que no les tiembla el pulso ante los ERE –que son masters del universo y que saben, porque lo padecen, que la marca España está lastrada por Zapatero– no se atrevieron a proponer el adelanto electoral. ¿A que no permitirían seguir en su puesto a un individuo que lastrase la imagen de marca de su compañía? No me vale que digan que eso es hacer política y que ellos no se meten en política, cuando no dejan de meter morcillas en el BOE a través de presiones e influencia. Los masters del Ibex deberían anteponer la defensa de nuestros intereses, como accionistas, a su interés personal de que no les muevan la silla por presiones políticas. En la actual coyuntura el interés del accionista coincide con el interés del ciudadano. Por cierto, ¿qué tipo de demócrata es Zapatero que se rodea de la aristocracia empresarial? ¿El pueblo no cuenta? ¿Por qué en vez de preguntar a 37 no pregunta a todos los españoles? ¡Adelanto electoral, ya!
Lo paradójico es que teme quien más poder tiene y asusta quien más ayuda necesita. No hace falta recordar que el poder no es algo objetivo, sino subjetivo, porque de nada vale disponer de medios si no se está dispuesto a utilizarlos.
El Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero, a través de un breve comunicado del Ministerio de Asuntos Exteriores, asegura que "mantiene todos los canales de comunicación abiertos" para abordar los asuntos de interés común con Rabat.
Rabat ha reaccionado así después de que el Congreso de los Diputados aprobara hoy una moción con el apoyo de todos los grupos parlamentarios a favor de "condenar los incidentes violentos" ocurridos durante el desalojo del campamento saharaui de El Aaiún el pasado día 8, aunque sin hacer mención a Marruecos.
La Cámara Baja también insta al Gobierno a "expresar a las autoridades marroquíes su preocupación ante las informaciones sobre violaciones de derechos humanos en el territorio del Sahara Occidental".
Ante las palabras del portavoz del Ejecutivo marroquí, el Gobierno español "manifiesta que mantiene todos los canales de comunicación abiertos con el Gobierno de Marruecos para la gestión de los diversos asuntos de interés común".
"El Gobierno reitera en todo caso su voluntad de mantener las mejores relaciones posibles con el Gobierno marroquí, desde el respeto a las instituciones de cada país", concluye el comunicado de Exteriores.
La moción del Congreso es similar en sus términos a la que aprobó el Senado el pasado martes y a la que también salió adelante por unanimidad en el Parlamento Europeo el pasado día 25, que Rabat la tachó de "parcial, injusta y precipitada".
La ministra de Asuntos Exteriores, Trinidad Jiménez, tiene intención de hacer declaraciones sobre la reacción de Marruecos mañana en Mar del Plata (Argentina), adonde está viajando en estos momentos con los Reyes para participar en la Cumbre Iberoamericana, han informado fuentes de este departamento.
El portavoz del PP en la Comisión de Asuntos Exteriores, Gustavo de Arístegui, ha calificado de "gesto excesivo y desproporcionado" que el Gobierno marroquí hable de replantearse el conjunto de sus relaciones con España tras la resolución aprobada hoy en el Congreso, que condena los incidentes de El Aaiún y señala a Marruecos por el boicot a la prensa y la represión.
Esta tarde el Gobierno marroquí ha avanzado que las circunstancias actuales requieren que se reexamine "el conjunto de las relaciones entre España y Marruecos en todos los sectores" por entender que la resolución del Parlamento español "se caracteriza por su hostilidad" hacia Marruecos.
En declaraciones a Europa Press, Arístegui ha dicho que "tomar una medida de ese calado y de esa profundidad" por la moción que ha aprobado el Congreso que, además "suaviza" el texto inicial de IU-ICV, es "un gesto excesivo y desproporcionado por parte del Gobierno de Marruecos".
No hay hostilidad
El diputado del PP ha señalado que el Gobierno marroquí "tiene que reaccionar con serenidad y con calma en estos momentos". "Y debe entender que el Parlamento de España cuando pide respeto a los derechos humanos, democracia, transparencia y respeto a los periodistas y la libertad de expresión no puede y no debe hacer otra cosa porque no estaría cumpliendo con el sagrado deber del Parlamento de un país democrático", ha asegurado.
Dicho esto, el portavoz de Asuntos Exteriores del PP ha expresado su deseo de que esta "escalada se quede en una escalada verbal". "Espero que se quede en eso, en palabras y no llegue a más", ha afirmado.
Así, ha recalcado que los grupos parlamentarios no han "hecho ningún tipo de acto de hostilidad" sino que han mostrado su "preocupación" por los derechos humanos. A su entender, hay que preocuparse por los derechos humanos "venga de donde venga", ya que, a su juicio, también debe condenarse la muerte de los diez agentes de seguridad marroquíes.
Ceuta y Melilla, "no son negociables"
Al ser preguntado por la marcha que han convocado este sábado organizaciones marroquíes "por la liberación" de Ceuta y Melilla, Arístegui ha recalcado que las dos ciudades autónomas "no son negociables, son españolas".
"Por muchas marchas que haya, verdes, azules o blancas con respecto a Ceuta y Melilla, son ciudades bajo soberanía española. Son ciudades democráticas elegidas por el pueblo de Ceuta y Melilla, y con independencia de la religión que tengan, son españolas", ha concluido.
El ex presidente de Gobierno José María Aznar admitió en 2007 ante el embajador de Estados Unidos en España, Eduardo Aguirre, en regresar a la primera línea de la política española, según se desprende de los cables revelados por Wikileaks. "Si veo a España desesperada, quizá tendría que volver a la política", reconoció el presidente de honor del PP.
En ese mismo encuentro de 2007 entre Eduardo Aguirre y el presidente de FAES, Aznar también reconoció, en palabras del embajador, que dudaba de que el actual presidente de los 'populares', Mariano Rajoy, fuera "el hombre adecuado para devolver el PP al poder", según informa 'El País'.
El ex presidente no es el único dirigente del PP que ponía en duda la capacidad de Rajoy para llevar al partido hasta La Moncloa e incluso el alcalde de Madrid y miembro de la Ejecutiva nacional, Alberto Ruiz-Gallardón, llegó a postularse como sustituto al frente de los populares. "Aguirre o yo -dijo el regidor madrileño- podríamos tomar el partido, pero a riesgo de partirlo".
La idea de ausencia de un relevo para Rajoy también reinaba dentro de la Embajada estadounidense -"creemos que su longevidad en el cargo se debe a la ausencia de un sucesor creíble", admitían- que también informó a la Administración de EE UU de confidencias realizadas por otros dirigentes populares censurando aspectos de la gestión de su jefe de filas.
Así, según 'El País', el coordinador de Relaciones Internacionales del PP, Jorge Moragas, admitió no ser "un hombre de Rajoy", mientras que el portavoz del PP en la Comisión de Asuntos Exteriores, Gustavo de Arístegui, lamentaba que el líder del PP culpara de la derrota electoral "a todo el mundo menos a sí mismo".
El ex presidente José María Aznar es un personaje con un seguimiento específico por parte de la Embajada de EE UU en Madrid. Diversos cables confidenciales que analizan la situación política española introducen el elemento Aznar en todo momento como distorsionador de la línea del PP y del liderazgo de Mariano Rajoy. Los diplomáticos de EE UU aseguran además que su línea directa con miembros de la administración Bush -hasta 2009- hace que él marque en muchas ocasiones la política exterior del PP. Además, los diplomáticos lo consideran una buena fuente para analizar Latinoamérica por sus contactos y viajes constantes a esta zona. Sin embargo, lo que más interesaba en la embajada de Madrid hasta 2009, como reflejan diversos cables, es la posibilidad de que Aznar volviera a la política activa.
Las sorpresas en forma de medidas anticrisis llevadas a cabo por el presidente Zapatero no cesan. El Gobierno está estudiando aprobar un incremento de los impuestos especiales del tabaco que entraría en vigor a partir del próximo mes de enero, coincidiéndo con la entrada en vigor de la nueva ley antitabaco, según Europa Press a través de una información de la Cadena Ser.
La medida se podría aprobar este viernes o el de la próxima semana, con el objetivo de que entre en vigor el próximo 1 de enero. Fuentes del Ministerio de Economía y Hacienda consultadas por Europa Press eludieron pronunciarse sobre este extremo.
Esta medida coincidirá con el endurecimiento de la ley del tabaco, que restringirá los lugares donde está permitido fumar, y que el Ejecutivo prevé poner también en marcha a principios del próximo año.
La última subida de los impuestos especiales del tabaco fue aprobada el 12 de junio del pasado año, una medida con un efecto recaudatorio de 1.220 millones de euros anuales, de los que 634 millones corresponden al Estado y el resto a las comunidades autónomas.
Anteriormente, el Ejecutivo había modificado el impuesto mínimo del tabaco en noviembre de 2006, en un escenario de guerra de precios desatada entre las principales marcas.
El presidente de la Fundación Pablo Iglesias, Alfonso Guerra, ha reivinicado esta noche que el PSOE recupere un "discurso nacional" que haga frente al "desconcierto" causado por la "fragmentación" en sus estrategias políticas y, para ello, ha reclamado que los socialistas no pierdan la "coherencia" que representan los valores de "igualdad y libertad" defendidos por el fundador del partido, Pablo Iglesias.
"¿Existe una identidad reconocible en el PSOE o lo que existe es una nueva identidad?", se ha preguntado Alfonso Guerra en una conferencia en la que ha dicho que quería ser "lo más objetivo posible" y que ha servido para cerrar el ciclo de actos del 'Centenario del primer escaño', organizado por el PSM y en el que también ha participado el secretario general de los socialistas madrileños, Tomás Gómez.
Guerra ha simplificado los "cambios del PSOE" en cuatro ideas: "un reconocimiento de las minorías que sustituye a las lucha de clases"; "la enorme conquista de la mujer en puestos de responsabilidad" --en las que el PSOE, ha dicho, ha pasado de las cuotas a la paridad efectiva--; "la evolución del concepto de igualdad, que ya no es una igualdad de clases sino entre géneros, que es importante pero no la única"; "y una pérdida paulatina del concepto de partido nacional al compás de la estructura del Estado".
En este sentido, el veterano socialista se ha mostrado crítico con los diferentes discursos que mantiene el PSOE en diferentes comunidades a propósito del carbón o de la política hidrográfica. También ha mostrado sus reparos a que este partido haga suyos los planteamientos defendidos desde formaciones nacionalistas, citando el concepto de "España plurinacional" o "catalanismo federal". En su opinión, tanto la Declaración del PSOE en Santillana del Mar como el Pacto de Tinell, ambos en 2003, sitúan al partido en "una órbita diferente".
Tras sostener que la "coherencia" del PSOE se encuentra en sus valores y no en sus estrategias y tácticas electorales, Guerra ha reivindicado la "continuidad" con la figura de Pablo Iglesias, quien representa el "faro" y el "gran triunfo" del socialismo en España, resumido en el ideario de "una España con más libertad y justicia, más culta y más solidaria".
"Igualdad y libertad", ha enfatizado, "pero sin primacía de ninguna idea sobre la otra".
"Luces y sombras" del PSOE
El ex vicepresidente del Gobierno ha hecho un balance con sus "luces y sombras" de la trayectoria del PSOE desde la transición a la actualidad, citando de pasada los "escándalos por apropiación indebida de algunos" socialistas. No obstante, ha resumido la historia reciente del PSOE como un camino de "éxitos" porque, ha argumentado, este partido ha gobernado en más de veinte de los últimos treinta años de democracia en España.
De esta forma, Guerra ha reconocido "cierta ingenuidad inevitable" cuando los partidos tomaron como primera decisión que la Ley de Amnistía dejara en libertad a los presos de ETA y a los encarcelados por rebelarse contra la joven democracia. "Se pensó que ETA entregaría las armas y que los otros nunca más se rebelarían contra la democracia", ha dicho.
En su discurso, ha defendido la Transición como "un conjunto de renuncias" de todos los partidos que, desde el punto de vista del PSOE, tuvo su punto álgido en la victoria socialista de octubre de 1982. "Aquel triunfo fue una celebración de la libertad de un partido que había pasado en cinco años de la clandestinidad a la responsabilidad de Gobierno", ha rememorado antes de enfatizar que se trata de un éxito "sin precedentes en la política mundial".
Decía Colin Powell que "un líder sabe qué se debe hacer; y un administrador, cómo hacerlo". El zigzag con el que Zapatero trata de sacar la cabeza ante la tormenta perfecta de la economía, y la desconfianza de los inversores, con medidas improvisadas, demuestran que no sólo no es un líder –cosa que adivinamos en cuanto puso el pie en La Moncloa y apadrinó la Alianza de Civilizaciones–, sino ni siquiera un administrador. Porque ni sabe qué hacer ni tampoco cómo hacerlo.
El último paquete de medidas no son malas en sí –van en la buena dirección– pero resultan insuficientes –al no guardar conexión con un plan global para encarar la crisis–; y llegan demasiado tarde, lo cual relativiza su eficacia. Si, de verdad, quisiera Zapatero reducir el déficit e impulsar la economía, no se hubiera conformado con esos tímidos pasos, sino que habría metido la tijera en el territorio todavía virgen del despilfarro público; singularmente, en las autonomías. Las privatizaciones, bien; pero tímidas: tiene mucha tela que cortar en ámbitos como las cajas de ahorros, y apenas ha tocado vastos territorios como los mercados laboral y energético. Algunos de esos asuntos estaban en la agenda de la famosa reunión de los empresarios en La Moncloa, pero ya sabemos que lo único que quería Zapatero eran unos flashes.
El qué es grave, por tímido y tardío; pero más inquietante aún es el cómo. En el dramático escenario de una economía en caída libre, tan grave como los contenidos son las formas, en la medida en que revelan la falta de criterio y el erratismo de quienes llevan las riendas del Ejecutivo. Si, el martes, el secretario de Estado del ramo afirmaba que el Gobierno no puede funcionar al ritmo que le marcan las fluctuaciones de los mercados, y 24 horas después Zapatero reaccionaba con su paquete de medidas para reducir la deuda; ayer presenciábamos otra escena no menos cómica (o, mejor, tragicómica). Una periodista de Intereconomía TV le preguntaba a Carlos Ocaña, secretario de Estado de Hacienda, cómo se explica que el PSOE acepte ahora propuestas del PP que ellos mismos vetaron, como, por ejemplo, las rebajas fiscales a la pymes. ¿Por qué antes sí y ahora no? "¡Gobernar no sólo es tomar decisiones –respondió Ocaña sin pestañear–, sino también marcar los tiempos". Y añadió, sin despeinarse: "Lo que en un momento es oportuno, en otro puede no serlo". ¡Chapeau! ¡Todo un ejemplo de coherencia! El diálogo tiene su enjundia, porque los socialistas tiraron para atrás no una sino dos veces las recetas del PP para aliviar la fiscalidad que soportan las pequeñas y medianas empresas. Hace un año, las vetaron en el Congreso; y recientemente, votaron en contra. Pero ahora llega un Zapatero entre dos fuegos y con el rescate europeo en el cogote, lanza el bote de humo de las medidas para tomar aire, y donde dijeron digo, dicen Diego. Incluso aunque la desesperada finta implique otro haraquiri ideológico para Zapatero. Primero fueron los tijeretazos sociales en mayo; y, ahora, la supresión de los 426 euros para los parados que ya no tienen subsidio, y que ha provocado malestar en las filas socialistas; o las privatizaciones de aeropuertos, –¡inimaginable hace unos meses!–, que se traducirán en conflictividad las próximas Navidades, tras los paros anunciados por AENA.
¿Quién marca a quién los tiempos? Con el nuevo volantazo, el Gobierno Zapatero demuestra que no sólo no marca los tiempos, como dice eufemísticamente Ocaña, sino que reacciona compulsivamente sin otro norte que la supervivencia, a costa, claro, de la agónica salud de la economía y del bolsillo de los españoles.
José Luis Rodríguez Zapatero ha mandado un mensaje tranquilizador a los mercados internacionales. En una entrevista con la enviada especial de la CNBC Maria Bartiromo, el presidente del Gobierno ha vuelto a mostrarse optimista sobre la economía española. Ha elogiado el sistema bancario español, destacando su estabilidad, su buena salud, su capitalización, sus beneficios. Ha asegurado que la economía española crecerá en 2011, y crecerá más que el resto de países de la UE 2012. Ha explicado que la privatización de AENA, los aeropuertos de Barajas y El Prat y del sistema de Loterías son oportunidades de inversión para capitales extranjeros. Y ha prometido que la reforma del sistema de pensiones será su mayor prioridad en 2011.
Economistas afines al Partido Popular consultados por este diario consideran que Mariano Rajoy debería haber estado más equilibrado en su reacción ante el nuevo paquete de medidas de ajuste anunciado por el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero. Para un destacado sector de estos economistas ha llegado la hora de que el principal partido de la oposición se implique
Burgos, que ha participado en Soria en un acto del PP, ha asegurado que el único inconveniente para llegar a un nuevo acuerdo en pensiones es que el Gobierno se ha empeñado en una reforma que no surge del Pacto de Toledo, como las de 1995 y 2003, sino la "que ha puesto unilateralmente encima de la mesa y que responde a compromisos con operadores internacionales e instituciones europeas pero que no es buena para España".
En este sentido, ha recordado que el PSOE se ha quedado sólo en su defensa de la reforma de las pensiones, ya que los sindicatos y los empresrios también le han señalado que el "escollo" fundamental es intentar prolongar de forma forzosa la vida laboral de los españoles "porque es una medida inapropiada en el contexto económico que tenemos".
A su juicio, la prolongación de la vida laboral causaría una lesión "enorme" de derechos en las pensiones, puesto que los trabajadores se verían penalizados más que ahora, donde uno de cada dos empleados no llega a 65 años para jubilarse.
"Habrá personas que con 40 años de cotización se tengan que retirar con una pensión penalizada del orden del 25 ó el 30 por ciento; esto supone un destrozo social en personas de las que no depende seguir trabajado", ha denunciado.
Para el diputado popular, el sistema de pensiones no se puede desligar de las reformas económicas y laborales, al ser un eslabón más de una cadena, "y tocarlo sin darse cuenta de cuál puede ser su efecto nos puede llevar a una situación social todavía peor, por eso el PP se opone a esta medida".
Burgos ha defendido que los españoles trabajen más años pero durante su vida laboral, desde 21 a 65 años, "en los que un ciudadano normal debería tener capacidad para desarrollar una carrera de cotización larga, estable y con derechos reconocidos".
Además ha abogado por facilitar incentivos a los trabajadores que quieran prolongar su vida laboral más allá de 65 años, así como eliminar la jubilación obligatoria en sectores como la función pública y la educación.
La Mesa de Asociaciones de administradores de lotería está valorando hacer huelga el 22 de diciembre, día del Sorteo Extraordinario de Navidad, para mostrar su oposición a la privatización de Loterías y Apuestas del Estado (LAE).
En rueda de prensa y representando a la Mesa, el secretario general de la Asociación de Profesionales de Loterías y Apuestas (Apla), Jordi Sastre, ha anunciado que tienen esta propuesta sobre la mesa, aunque todavía se debe decidir.
Por estos paros, algunos establecimientos tienen abiertos expedientes sancionadores que pueden suponer multas de hasta 60.000 euros.
La Mesa de Asociaciones representa al 60% de las 4.200 administraciones de lotería que hay en España, y está formada por la Apla (de Barcelona), Anapal (Madrid) y Fenapal (Oviedo).
PP, CiU y BNG han sacado adelante el veto a la totalidad del Presupuesto para 2011 presentado por la formación gallega, frenando así la tramitación de las cuentas en la Comisión de Presupuestos del Senado, que pasará directamente a debatirse y votarse en el Pleno de la Cámara Alta la semana del 13 de diciembre.
En Comisión, los grupos parlamentarios votan en bloque, por lo que el veto presentado por BNG, el tercero en votarse, ha contado con 14 votos a favor (PP, CiU y Senadores Nacionalistas) y 12 en contra (PSOE, Entesa y Grupo Mixto).
Este veto frena una vez más la tramitación de las cuentas en la Comisión y las envía directamente al Pleno, donde se volverán a defender y votar las cinco enmiendas a la totalidad que se han presentado a los Presupuestos en el Senado (PP, CiU, ERC, ICV y BNG).
El presidente del Gobierno español, José Luís Rodríguez Zapatero, confía en que la economía española volverá a crecer el próximo año e incluso apunta que, según un análisis del FMI, España podría registrar la mayor tasa de crecimiento de UE en 2012 ó 2013.
"El 2011 la economía volverá a crecer (...) El FMI dijo que España podría ser uno de los países de la UE con mayor tasa de crecimiento en 2012 ó 2013", afimó Zapatero en una entrevista concedida a la cadena estadounidense CNBC. "Hay algunos análisis del FMI y de JP Morgan que dicen que España será uno de los países con mayor atractivo en el mercado de valores", añadió.
Asimismo, el presidente del Gobierno aseguró que no sólo el sistema bancario de España es solvente y está "absolutamente" bien capitalizado, sino que subrayó que representa uno de los más atractivos destinos para la inversión.
"No sólo es solvente y está bien capitalizado, sino que ha hecho sus deberes y los seguirá haciendo...y por esa razón resulta uno de los sistemas financieros más atractivos para la inversión", afirmó Zapateró, quien además, rechazó la posibilidad de que las entidades españolas deban asumir fuertes pérdidas por la depreciación de los activos inmobiliarios en sus carteras.
"Nuestro sistema cuenta con garantías y la capacidad para afrontar las reformas adecuadas, así como un marco normativo moderno y la fortaleza necesaria para cumplir con Basilea III en un razonable periodo de tiempo", explicó.
Descarta un rescate de la UE
Por otro lado, el presidente del Gobierno reiteró su rechazo a la posibilidad de que España se vea forzada a recurrir al rescate por parte de sus socios europeos para superar la crisis económica.
En este sentido, Zapatero aseguró de manera categórica que los inversores privados en deuda pública española puedan llegar a verse obligados a asumir costes mediante la aplicación de descuentos ('haircuts').
El hasta ahora presidente del Parlamento de Cataluña, Ernest Benach, quien ocupa este cargo desde el pasado 5 de diciembre de 2003, cobrará 104.008,95 euros brutos al año durante los próximos cuatro años, así como una pensión vitalicia a partir de los 65 años de 78.006,71 euros, según informa el 'Diari de Girona'.
De acuerdo con la normativa vigente, Benach tiene derecho a percibir, como el resto de expresidentes, "por un período equivalente a la mitad del tiempo que ha estado al cargo, y como mínimo durante una legislatura", una asignación mensual equivalente al 80% de la retribución mensual que corresponde al presidente parlamentario. Después de la rebaja del 15% aplicada este año, el sueldo anual bruto para el presidente del Parlament es de 130.011,189 euros brutos.
Benach se ha dedicado toda la vida a la política salvo un corto periodo de tiempo en 1979 en el que "entra a trabajar en la Dirección General de Transportes de la Generalitat, y al cabo de unos años pasó a la Dirección General de Juventud".
No hay comentarios:
Publicar un comentario