jueves, octubre 20, 2005

Deconstruyendo el estatuto (V)




ABSURDA REVOLUCIÓN
ABSURDO:
Contrario y opuesto a la razón; que no tiene sentido. (DRAE)

REVOLUCION: Cambio violento en las instituciones políticas, económicas o sociales de una nación.(DRAE)
Ambas definiciones son aplicables a lo acontecido el 11M en Madrid.
Desde entonces trabajamos para conocer la verdad, honrar la sangre derramada, y defender nuestra LIBERTAD.


http://nacionalismo.blogs.com/byebyespain/2004/09/post.html
Hola ... ¿Qué tal? ... amigo,
¿Qué sabes del 3%?, ¿Y de Mohamed?
 
Si,  pero ...  "Tenemos un Rey muy republicano ... porque defiende los principios democráticos" ...  ja.

http://areslabones.blogspot.com/




Deconstruyendo el estatuto (V)




Preámbulo (continuación)


-El autogobierno de Cataluña se inscribe, pues, en estos valores y objetivos, que desarrolla en el ámbito de Cataluña y que promueve en el ámbito español y el europeo, especialmente la defensa de la pluralidad de lenguas y culturas, a la que Cataluña aporta el catalán como lengua  propia y común de toda la ciudadanía con independencia de su lengua de origen y de uso habitual. Este es un Estatuto de personas libres para personas libres. La libertad política que se alcance como país nunca debe ir en contra de las libertades individuales de los ciudadanos de Cataluña, porque solo es libre de verdad un país donde cada uno puede vivir y expresar suficientes identidades diversas, sin ninguna relación de jerarquía o dependencia entre ellas.-
 
-El catalán como lengua propia y común de toda la ciudadanía, con independencia de su lengua de origen y uso habitual-. No lo acabo de entender, pero muy liberal no suena. O sea, que la lengua propia de todos los catalanes es el catalán, aunque hablen castellano.
 
No me negaréis que el segundo párrafo es glorioso: un estatuto de personas libres para personas libres. ¿Hacía falta decirlo, o es que aquí es aplicable aquello de excusatio non petita, accusatio manifesta? Porque la segunda frase inquieta un poco: -la libertad que se alcance como país (se ve que Cataluña no es un país libre, claro, de ahí este estatuto) nunca debe ir en contra de las libertades individuales de los ciudadanos-. Ya. Si es que pone los pelos de punta el mero hecho de que el legislador se vea en la necesidad de aclarar esto en el preámbulo de su constitucioncita. Parece que nos preparen para algo, como cuando el dentista nos dice no le va a doler apenas.

Germont miembro de AR y Foro Liberal



En respuesta a la vorágine nacionalista, seguimos con la serie de reflexiones:

"Deconstruyendo el Estatuto"
de Germont



D. Mariano Rajoy en la televisión de Cataluña (Canal-33)
17-10-2005


 

 http://www.tvcatalunya.com/3alacarta/video.htm?ID=192974766&CAT_ID=tvcat







http://www.inn.org.es
http://www.inn.org.es/

¿Ante el nuevo Estatuto...? NO, por supuesto

Allí donde haya un político catalán, empezando por el M. H. señor Maragall, allí hay un discurso, una advertencia, una amenaza sobre el Estatuto. El lugar es anecdótico, porque en los últimos tiempos da igual dónde vayan, quién sea su público, cuál sea la problemática; la reforma estatutaria es ya un monotema, una obsesión que impregna a todos los políticos de la región -y a algunos que no son catalanes, dicho sea de paso- y a la mayoría de los medios de comunicación, pero que no consigue interesar lo más mínimo a los ciudadanos de a pie.

Cualquiera diría que el interés de la gente por este nuevo Estatuto es directamente proporcional a la preocupación que el texto en discusión muestra por los problemas de los ciudadanos. Derechos históricos, cupo, blindaje competencial, definición de nación, deberes lingüísticos... ¿a quién esperan que interesen esos debates, más que a los profesionales de la confrontación y la división que alientan esos conflictos para vivir después de ellos?

Cunden los nervios, porque a pesar de todo, los políticos son conscientes de que el Estatuto se ha convertido en una cuestión personal para Maragall, para Carod, para Mas y para todos los satélites que siguen cómodamente su órbita desde las poltronas sindicales, pseudocívicas, pesebristas, empresariales. Pero para nadie más: el interés por el nuevo texto, y el compromiso con 'este' articulado, sigue siendo sinónimo de sumisión o dependencia de las esferas de poder político regional. Y eso que el establishment ha echado mano de todo lo que ha podido: empresarios, organizaciones obreras, clubes de fútbol, carteles 'anónimos', anuncios en los medios, autobuses del "Festatut" para recorrer Cataluña, todo lo que se puede pagar con dinero, con nuestro dinero, por supuesto. Pero no han conseguido nada en lo que a entusiasmo popular se refiere, porque este Estatuto, si es que llega a nacer, nacerá muerto. Muerto, intoxicado con el último aliento de una oligarquía que tomó a Cataluña y a los catalanes como rehenes hace ya 25 años. Muerto, por más que los políticos catalanes, presos de esa realidad virtual en la que viven, se sientan obligados a dar luz verde a un texto que suena a viejo antes de haber visto la luz. Muerto, aunque las deficiencias del sistema electoral español, los complejos nacionales e históricos del socialismo oficial y el conservadurismo y unas circunstancias políticas especialmente peculiares hagan posible su aprobación en Madrid. Muerto, falto del impulso, la tenacidad y la complicidad social con la que sí contaron la Constitución de 1978 y el Estatuto de 1979. Muerto, porque lo que entonces se pedía a gritos en las calles, en manifestaciones masivas y emocionantes, hoy sólo se pide desde despachos fríos, bien lujosos, en cartas que llevan membrete oficial y en discursos monótonos, anodinos, estomagantes, donde la calidad de la megafonía supera con mucho la del mensaje.

La elevación de la reforma estatutaria a prioridad absoluta en la política catalana es fruto de la impotencia y del agotamiento del catalanismo burgués -nacionalismo transversal- que se enseñoreó de la región durante la transición. Los socialistas de Obiols y Raventós, quemados tras más de veinte años en los bancos opositores de la Ciudadela y decepcionados por el bluff de su último gran cartucho de 1999 -la candidatura del heterodoxo, genial, simpáticamente imprevisible Maragall-, decidieron sacarse de la manga una reforma estatutaria con la que desbordar a los convergentes en su propio terreno. Diríase que intentaban montarse en la novedad del texto legal para camuflar su persistente incapacidad para conectar con la mayoría de progreso que había hecho de Cataluña uno de los principales graneros de voto socialista... en las elecciones generales. Convergència, asustada por la pujanza nacionalista de Esquerra e internamente avergonzada de sus pactos con el PP -que incluían no hablar de reformas de envergadura a cambio de poder, lo que ilustra la sinceridad de su actual devoción estatutaria-, también recurrió al Estatut como conjuro para ahuyentar el fantasma de la alternancia en la Generalidad y exorcizar los riesgos de fractura interna que se vislumbraban tras la jubilación del mítico Pujol. Así que estamos hablando del rescate de una idea, la reforma de la Ley regional catalana, que sólo Esquerra ha defendido desde los tiempos de Heribert Barrera y al que ahora se apuntan los burocratizados y grises partidos mayoritarios, por si con él pueden disimular su obscena sed de poder y su absoluto desprecio a los catalanes.

El Estatuto que el Parlament ha votado, tras su enésimo aplazamiento, el 30 de Septiembre, no es hijo de ningún impulso nuevo. No es principio de nada, ni abre ninguna etapa ni trae el futuro a Cataluña. Es la expresión de un ciclo político que decae, que no tiene nada nuevo que ofrecer -más enfrentamiento estéril con el resto de España, más fractura social entre castellanohablantes y catalanohablantes, más sesgo nacionalista, más victimismo, el mismo peligroso perro que en los últimos años, pero con otro collar- a una Cataluña que, usurpada durante veinticinco años a todos los catalanes, se desentiende con gesto hastiado de la clase política y le vuelve la espalda. En el fondo, el drama para la agónica sociovergencia, cuya máxima hazaña ha sido el secuestro del PSC por parte de la élite burguesa y nacionalista a la que tan bien representa el presidente Maragall, no es que el Estatuto se aplace una y otra vez. El drama es que a nadie le importa. Es posible que consigan superar sus mezquinos y bizantinos debates y el nuevo Estatut sea una realidad jurídica el año que viene. Pero el tránsito de la indiferencia a la hostilidad social ya ha empezado, puede alargarse más o menos pero el sonrojante debate estatutario ha tenido la virtud de iniciar la cuenta atrás.

Ara és l'hora catalans! No hay ni una brizna de futuro en el nacionalismo, que sigue aferrado a las estructuras institucionales de Cataluña; no hay ni un resquicio de esperanza en este Estatut incapaz de salir de la noche de los tiempos para justificar su mera existencia. Pero el pasado y el resentimiento que rezuman uno y otro pueden extender sus moribundos tentáculos en el tiempo y condenar a nuestra región a una larga agonía, a un estancamiento letal que erosione todavía más la potencia y la vitalidad de una sociedad civil que fue espejo de prestigio, referencia y modelo para los sectores más avanzados de toda España. Como ciudadanos comprometidos con un proyecto cívico que se llama Cataluña y España simultáneamente, tenemos el deber de decidir entre la continuidad sin esperanza que ofrece la poltrona nacionalista en sus múltiples versiones -el victimismo convergente, el camorrismo bronco, grosero y vacío de Esquerra, el cinismo hamletiano de la vieja guardia del PSC-, y la apuesta decidida y rupturista por el futuro de nuestra región. Ante la incapacidad de nuestros representantes para salir del pantano estatutario, corresponde a la ciudadanía tomar la iniciativa y devolver el Estatuto al lugar del que jamás debió salir: al cajón de las pesadillas, al archivo de las alucinaciones identitarias, a la pila de situaciones ridículas en las que nunca querríamos vernos. No hay en la clase política de hoy ningún dirigente capaz de devolver el seny a la atolondrada e irresponsable deriva estatutaria: será la ciudadanía la que haga salir a esta región del laberinto en que nos han metido.

Ya que no parece servir para nada más, hagamos del Estatuto el broche final de una etapa pasada, deshagámonos de los lastres y devolvamos a Cataluña el dinamismo, la potencia y la grandeza de otros tiempos: el NO al Estatuto y la movilización activa por su neutralización es un SÍ al futuro de los catalanes y del proyecto cívico que compartimos. Es un sí alto y claro, desacomplejadamente resuelto, a los valores que el Estatuto ha descartado con el asentimiento cómplice o militante de la clase política, es una apuesta sólida y profunda por la solidaridad, la cohesión, la igualdad y el progreso conjunto de catalanes con el resto de españoles. Si finalmente los nacionalistas son capaces de doblegar sus tentaciones cainitas, si el PSC consuma la traición nacionalista al socialismo de toda España y este Estatut se aprueba en el Parlamento regional y en las Cortes Generales, la izquierda no nacionalista sólo tendrá una opción en el referéndum de confirmación en Cataluña: no, por coherencia, no, por principio, no, por convicción, no, por sentido común y NO, por supuesto.

Es una apuesta compleja, pero no es suficiente. Desde INN no queremos limitarnos a reaccionar contra el Estatuto, precisamente porque éste es el producto final de una ideología excluyente, oscura y peligrosa, que bebe en fuentes predemocráticas y no puede aportar más que resentimiento y frustración al futuro de Cataluña. Queremos que esta reforma estatutaria, síntesis y resumen de despropósitos del nacionalismo gobernante desde la transición, sea también su epílogo. Queremos detener este texto desde Cataluña, pero no podemos dejar de combatir democráticamente sus causas. Queremos sentirnos cómodos como catalanes en España y cómodos como españoles en Cataluña, siendo como son España y Cataluña expresiones de un mismo proyecto cívico, despojado de fanatismos identitarios y empapado del espíritu liberal y progresista, en el mejor sentido de ambos conceptos, de la Revolución francesa. Queremos superar el nacionalismo y, con él, una espiral de enfrentamiento, enconamiento, fanatismo y manipulación que dura ya demasiado y cuya última expresión es esa clase dirigente hoy agarrada al Estatuto nuevo, como el náufrago que sigue trepando al palo de un velero que sigue sumergiéndose, inexorablemente...

Es una tarea ingente, pero podemos hacerla contigo. Se trata de demostrar que no todas las sociedades tienen los políticos, ni las losas, que se merecen. J.A.C.




http://www.e-noticies.com/
http://www.e-noticies.com/

ERC amenaça Maragall d'anar-se'n amb CiU.



El secretari general d'ERC, Joan Puigcercós, va advertir –divendres passat– Pasqual Maragall que la seva formació no acceptaria la destitució de cap conseller republicà i li va recordar que fer el contrari seria tant com trencar el Pacte del Tinell que va donar lloc al govern tripartit, segons informa avui l'ABC. Tanmateix, el president d'ERC, Josep-Lluís Carod-Rovira, en la intervenció d'ahir al Parlament va voler recordar al president Maragall que ERC va fer una "aposta estratègica" pel tripartit subscrivint el Pacte del Tinell al costat del PSC i ICV, malgrat que podria haver optat per una "altra majoria [amb CiU]", segons recull avui El Mundo.

No passa res.




Les formacions que integren el tripartit han fet pinya al Parlament –com es veurà avui en les votacions de les resolucions del debat de política general–, però el debat no ha tancat la crisi. El Govern queda pendent de l'anunciada remodelació que el mateix Maragall va afirmar ahir que "s'ha de fer", malgrat que el PSC va advertir que era un "risc". La discussió a la cambra catalana també ha afeblit la figura del president de la Generalitat per la manca de suport del PSC, ERC i ICV-EUiA a les seves intencions i ofereix arguments a Madrid contra l'Estatut. Maragall té intenció de fer canvis, però seran més limitats del que volia



De: André Pérez
Fecha: jue,  20 de oct, 2005
Asunto: NO MAS 3% CON MI DINERO

A ver si nos vamos apuntando que ya no hay tiempo

http://i19.photobucket.com/albums/b194/absurdarevolucion/w.jpg


http://www.libertaddigital.com/suplementos/estatut
http://www.libertaddigital.com/suplementos/estatut


BLANCO COMPARA SUS ARGUMENTOS CON LOS DE BLAS PIÑAR
Rajoy acusa a Zapatero de estar provocando que algunos cambien el "váyase" por el "vuelva, señor González"
http://www.libertaddigital.com/noticias/noticia_1276263457.html

Mariano Rajoy.
El líder del PP ha pedido a Zapatero que no utilice a Maragall como "chivo expiatorio" y le advirtió de que algunos que están cambiando el "váyase señor González" por el "vuelva señor González". La socialista Chacón dice que las críticas del PP al Estatut son un "ataque a Cataluña" para "desgastar a Zapatero" y Blanco compara los argumentos de Rajoy con los de Blas Piñar. Mientras, Ibarretxe aprovecha el Estatuto catalán para lanzar una advertencia: "Podrá haber un Estado español si así lo quieren las naciones que forman parte de él".

(Libertad Digital) El presidente del PP, Mariano Rajoy, ha instado a José Luis Rodríguez Zapatero a "dar marcha atrás" en sus planes para aprobar la reforma del Estatuto catalán porque "dar marcha adelante haría más daño". "Lo mejor para los españoles, para los catalanes y para el señor Rodríguez Zapatero", según explicó, es que el Estatut no sea aprobado en el Parlamento y recordó al presidente que "tiene que elegir entre la "lealtad a la Constitución o a sus socios".
 
Sobre las consecuencias de la gestión de Zapatero, el líder popular ironizó que ya hay algunos que están cambiando el célebre "váyase señor González" por el "vuelva señor González". Pero Rajoy se excluyó de los que reivindican su vuelta a la presidencia. "Yo no... pero a la secretaría general del Partido Socialista no me importaría", concluyó. El presidente del PP no quiso dejar pasar la ocasión para afirmar que viendo lo que está pasando actualmente en España" la figura del ex presidente del Gobierno José María Aznar "se multiplica con 150 millones, o casi por el infinito". (Lea ampliadas las palabras de Rajoy).
 
En respuesta al líder popular, el secretario de Organización y Coordinación del PSOE, José Blanco, dijo que lo "mejor" que podría hacer Rajoy es darle la Presidencia del PP y dejara de "engañar a los españoles". Blanco atacó al PP comparando sus argumentos con los que daba Blas Piñar en 1979 para oponerse al Estatuto de Sau y a los responsables de la patronal CEOE les exigió que sean más "rigurosos" en sus opiniones sobre la reforma. El responsable socialista no pudo evitar referirse al término "nación" del Estatuto catalán, apuntando a que la definición "puede ser constitucional, pero no conveniente". No obstante, en su opinión el debate debe centrarse en el interés general y no sólo en si el texto cumple la Constitución. Respecto a las encuestas que reflejan la caída de las encuestas, aseguró que los sondeos del PSOE les dan "seis puntos de ventaja" respecto al PP. (Lea ampliados los sondeos de Blanco).
 
Chacón y "la OPA de La Caixa". En Antena 3, la vicepresidenta del Parlamento español, Carmé Chacón, y compañera de Blanco ha dicho que "el PP se equivoca si creen que atacando a Cataluña pueden desgastar a Zapatero". La diputada del PSC también acusó a los populares de estar "en soledad, gritando mucho" y criticó el "todo vale" con tal de atacar al Gobierno. "Hasta el punto", dijo Chacón, que sobre "la OPA de La Caixa sobre endesa" –hasta ahora para el Gobierno la OPA la había lanzado Gas Natural– el popular "Arias Cañete dijo que prefería que fuera una empresa alemana y no catalana la que opara a Endesa". Chacón, que quiso recordar que es "hija de andaluz y de catalana", afirmó que se siente "miembro de la nación catalana y de la nación española". "Los catalanes somos españoles. Que no nos echen ellos", exclamó en referencia al PP. Sobre el presidente de su partido, el PSC, Chacón dijo que "los humanos se equivocan y Maragall se equivocó" en su decisión de cambiar el Gobierno.
 
"Nación: la insignia del buque". A la misma hora que Chacón, esta vez en Telecinco, el portavoz de ERC en el Congreso, Joan Puigcercós, se refería a un hipotético cambio del término "nación" en el Estatuto y advirtió de que dicha definición es "la insignia del buque", en referencia a la reforma estatutaria. Puigcercós indicó que no aceptarían un "no por bandera" y señaló que a él le "gusta comunidad nacional". Indicó que no cree que términos como éstos "sean suficientes para calmar exigencias" del PP o de ciertos "barones socialistas" y apeló al "sentido común" para que permanezca el término "nación" porque es lo que prefirió el Parlamento catalán.
 
Desde CiU, Felip Puig, dijo que los negociadores catalanes del Estatuto no deben acudir al Congreso "con rodilleras y a cuatro patas". Además, denunció que se están generalizando los ataques al texto: "Yo me pensaba que sólo estaban los de UltraSur, ahora ya veo que es toda la grada". (Lea ampliadas las declaraciones de Felipe Puig).

Del Estatuto al Plan Ibarretxe... En medio de todo el debate político, el lehendakari, Juan José Ibarretxe, ha vinculado el futuro debate en el Congreso del Estatuto catalán y dijo que "o se podrá predicar del Estado español que es un Estado democrático si no se admite la decisión del Parlamento de Cataluña o el vasco. En declaraciones a RNE, Ibarretxe advirtió de que "en definitiva, podrá haber un Estado español si así lo queremos las diferentes naciones, las diferentes regiones que formamos parte de él". (Leer las declaraciones ampliadas de Ibarretxe)
















PÁSALO
http://es.groups.yahoo.com/group/absurdarevolucion/
http://absurdarevolucion.blogspot.com/
http://www.zonaforo.com/absurdarevolucion/index.php
absurdarevolucion@yahoo.es




Correo Yahoo!
Comprueba qué es nuevo, aquí
http://correo.yahoo.es

No hay comentarios: